lunes, 24 de agosto de 2015

Vivid, que nos hace falta.

Vamos por el mundo dando vueltas sin sentido, esperando al amor de nuestra vida sin saber que podemos enamorarnos cientos de veces de miles de cosas, que podemos ver el atardecer desde nuestra ventana, no observamos nuestro al rededor, ni nos damos cuenta del mensaje en la pared que dejó un poeta callejero, no vemos que nuestro amigo está muerto por nuestros huesos, que llega el otoño y se caen las hojas, que las historias de series de televisión podemos vivirlas si salimos afuera.
Damos vueltas interminables por nuestra ciudad sin observar que hay nidos nuevos, que han salido las rosas en el parque, que ha pasado un torbellino a nuestro al rededor, buscando ropa nueva, el disco de nuestro artista favorito sin saber que hoy quizá llueva, que puede refrescar porque el cielo está nublado y estamos ocupados mirándonos los zapatos.


Parad. Dejad de dar vueltas, sentaros a observar el mundo un momento, descubrid, enamoraos de vuestro al rededor, soñad con un nuevo planeta, vivid. No tenemos tanta prisa, nos quedan muchos años que vivir, muchas historias que contar y miles de amores, que quizá no sean ni personas.

Vivid, que nos hace falta.