martes, 22 de abril de 2014

A Bécquer.

Y esas golondrinas (de las que tanto se habla),
esas que escribiste y tanto enamoraron,
y que los nidos colgaron
ya las veo yo pasar,
las que susurran tu nombre
y me dejan a desolado.

Y esas madreselvas (que todos queremos rescatar)
esas que escribiste y tanto gustaron.
y las flores que crecían
ya nunca se abrirán,
los ojos se inundan de lágrimas
al pensar, que nunca más escribirás.

Y el amor de sus oídos (que quisiste rescatar),
esas las palabras ardientes que queremos escuchar.
Y tu profundo sueño,
ya nunca acabará pero
las palabras que has dejado,
esas...no morirán.